LOCURAS CUERDAS – Coronavirus: Entre fifís y Chairos.

LOCURAS CUERDAS.
El Bravo de Matamoros.

Coronavirus: Entre fifís y Chairos.

La Patria no existe sin la lealtad de sus hijos. Antonio Maura.

El 14 de marzo de 1858 Guillermo Prieto salvó la vida de Benito Juárez. ¡Levanten las armas, los valientes no asesinan!, fueron las palabras del célebre poeta, escritor y político, Secretario de Hacienda itinerante Guillermo Prieto Pradillo al interponerse en la ciudad de Guadalajara al pelotón que intentó asesinar al presidente Benito Juárez y sus ministros.

Por sus méritos, Guillermo Prieto es un personaje histórico indiscutible. Su vida estuvo llena de privaciones. Fue privilegiado de recibir la ayuda incondicional de su protector Don Andrés Quintana Roo, sí, ese que en su honor un estado de la Riviera Maya lleva el nombre de su apellido. El señor Prieto fue secretario de hacienda no solo con Benito Juárez, también con Mariano Arista y con Juan Álvarez, puro nombre de calles en diversas ciudades de nuestro país.

Un integro hombre de la Reforma de quien AMLO toma el ejemplo de responder con crueles ironías a los conservadores de su época. Y a pesar de haber salvado la vida a Benito Juárez, no fue su incondicional pues cuando el indio de Guelatao decidió quedarse en el poder más tiempo de lo debido, Guillermo Prieto prefirió, a manera de protesta retirarse hacia los EU y no retornó hasta que el Benemérito de las Américas dejo el poder.

Hago esa introducción histórica para ahora aterrizar en nuestra época actual en donde otro subalterno del presidente en funciones pretende, no salvar la vida, pero si salvarle el momento. Toda proporción guardada.

¿En qué momento se le ocurrió al subsecretario de salud, con funciones de secretario, Hugo López Gatell Ramírez, decir semejante argumento, por no decir barbaridad, con esa parrafada y recitativo de que “La fuerza del Presidente es moral, no es una fuerza de contagio?

Este Médico Cirujano, con especialidad en Medicina Interna y maestro en Ciencias Médicas, Odontológicas y de la Salud por la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM); es además Doctor en Epidemiología por la Universidad de Johns Hopkins en Baltimore, Maryland; Estados Unidos de Norteamérica. En pocas palabras es un científico consumado.

El mismo que antes de ser parte del equipo de salud que enfrenta al coronavirus en el presente sexenio de AMLO, formó parte del escuadrón de salud contra la Influenza AH1N1 en la administración del némesis de su actual jefe, Felipe Calderón. Quien se ha encargado de las conferencias sobre la pandemia en el país, a quien no podemos regatearle su calidad de científico pues está más que demostrado que es un experto en situaciones de contingencia de salud, ya que en el 2009, durante el brote de la Influenza AH1N1 fue Director General Adjunto de Epidemiología de la Secretaría de Salud.

El señor sabe da aguacates. No es un neófito en el tema. Pero tuvo un resbalón retórico que podemos catalogar de signos discursivos desconcertantes, pues se puso a hacer malabares con la fuerza moral de AMLO y la fuerza de contagio del Covid 19. Dos bolas de juego, que no tiene nada que ver una con la otra, y mucho menos viniendo de un científico.

Si el subsecretario de salud de AMLO quiso emular, repito, toda proporción guardada, al secretario de hacienda de Benito Juárez, creo que quedo muy mal parado con esta defensa.

Más que comportarse como un científico, López Gatell se comportó como un político oportunista y olvidó por un momento que en nuestros tiempos, primero los excesos del clima, después la importancia de los negocios que se tratan, y si me apresuran un poco menciono la insignificancia de las cosas frívolas, así como la rapidez del crepúsculo y la calidad de los placeres, absolutamente todo exige buena salud. Sin salud no hay 4T.

Querido y dilecto lector. Debo decirte que ayer lunes el conteo de coronavirus a nivel nacional subió de 53 a 82 casos. ¿Qué necesidad de jugar con la ruleta rusa sanitaria?

Por otro lado los antipejes se han visto también muy mal con aquella nota precipitada de dar por muerto al empresario José Kuri y utilizar esa falsa noticia para irse contra la yugular de López Obrador, y demuestran que, más que el bien del país, lo que quieren es que el presidente se equivoque para tener más posibilidades de retornar al poder. Muy lamentable.

El Coronavirus ha venido a desenmascarar las verdaderas intenciones que hay en muchos personajes que deberían más bien procurar el bien de nuestro país, más allá de filias y fobias partidistas.

El tiempo hablará.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *